Elegir una cama para nuestros hijos adolescentes puede ser más difícil de lo que parece a simple vista, pues llega un punto en el que no podemos negar que ya no son niños pero sin perder de vista que su cuerpo todavía se está formando. Se trata, de hecho, de edades críticas en las que es necesario asegurarnos de que sus ciclos de descanso son los adecuados y que, además, duermen en un colchón de calidad que se adapta a su postura y les ayuda a perfeccionarla. Es por eso por lo que, aunque muchas veces nos sentimos tentados de que sean ellos quienes la elijan por mera comodidad o incluso dejadez, es necesario tener la certeza de que el colchón por el que optemos cumple con los requisitos que necesita nuestro hijo.
Aspectos a considerar al elegir una cama para adolescentes
Como comentábamos, es necesario tener en cuenta una serie de aspectos antes de elegir la cama de nuestro adolescente. Hacer la transición de una cama par niños a una cama adolescente será un gran paso, y rara vez sucede de forma gradual, pues siempre llega un punto en el que te das cuenta de que tienes que empezar a revisar un catálogo distinto para confeccionar ya no solo la cama sino también el dormitorio juvenil de tu hijo, que está creciendo a pasos agigantados.
Entre los conceptos que debes considerar al elegir una cama para alguien entre esas edades destacan los siguientes:
Tamaño
El tamaño es uno de los primeros aspectos en los que te fijarás por necesidad, y es que tendrás que tener en cuenta el espacio del que dispones en la habitación de tu hijo o hija. En esa misma línea, tienes que pensar en una cama que se adapte a su crecimiento, pues es muy probable que en breves dé el estirón y no querrás tener que volver a cambiarle la cama en unos pocos años por habérsele quedado pequeña. Asegúrate de comprar una cama adecuada que sea capaz de adaptarse al cuerpo de tu hijo conforme crezca durante los próximos años, pues es cuando más cambios va a experimentar, y todo su cuerpo necesitará un buen soporte para evitar malformaciones o posibles dolencias o lesiones en el futuro.
Firmeza
En la misma línea del punto anterior, la firmeza de un colchón depende de muchos factores, y por norma general se recomienda que los niños y adolescentes cuenten con un colchón más firme que las personas mayores. Sin renunciar por ello a la comodidad, como veremos más adelante, el colchón que escojas para tu adolescente deberá tener la firmeza adecuada. Este concepto se determina en función de dos factores: la sensación inicial al tumbarte sobre el colchón y la sensación que tienes al pasar un rato tumbado en él, de ese modo no solo puedes corroborar que la firmeza se ajusta a sus necesidades (si no se hunde ante su peso, si se ajusta a su postura) y, además, puede asegurarse de que le resulta cómodo para dormir sin problema.
Transpirabilidad
Como en muchos casos, la transpirabilidad es un concepto clave para acertar con el colchón, sobre todo si hablamos de adolescente calurosos. Asegurarte de que cuentas con un colchón que transpira adecuadamente garantiza una vida útil mucho más amplia, unas condiciones adecuadas de higiene y además una mayor comodidad para tu adolescente.
Comodidad
Como ya hemos anticipado, la comodidad no deja de ser un factor clave para elegir un colchón, y es que por mucho que cumpla con los requisitos adecuados para cuidar la postura de tu hijo, si él no se siente cómodo en ella no pegará ojo, y de hecho puede llegar a resultar perjudicial, ya que si no es capaz de encontrar una postura que le facilite conciliar el sueño es probable que acabe adoptando posiciones que fuercen alguna extremidad o desarrollen tortícolis. Cuando vayas a elegir la cama de tu hijo, asegúrate de que te acompañe para que sea él quien pruebe cada uno de los colchones y pueda escoger, si el cómputo global se adecúa a lo que necesita, cuál le gusta más.
Diseño adecuado
Por último, pero no por ello menos importante, contar con un diseño adecuado también es relevante, aunque no lo parezca a simple vista. Hablamos de una etapa en la que los cambios constantes y la búsqueda de la identidad propia lo son todo, y es por eso por lo que tus hijos sí le darán más importancia a algo que a ti puede importarte menos, como es el diseño del canapé o de la estructura de la cama en sí misma. Si estás buscando no solo un colchón sino también una cama adecuada para adolescentes, tendrás que fijarte especialmente en la estructura que se te presenta.
Esto es: hoy por hoy existen infinidad de diseños de habitaciones juveniles para adolescentes, incluyendo camas abatibles o muebles convertibles que permiten ahorrar espacio y no renunciar a la personalidad propia de tu hijo, que podrá decorarla como guste. Lo más importante en estos casos es permitir que sean ellos quienes decidan por qué decoración optar, garantizando así que, además de contar con un colchón cómodo, firme y seguro, también disponen de una habitación propia en la que ser ellos mismos y en la que desarrollarse tanto física como psicológicamente.
Como ves, son muchos los aspectos que es preciso tener en cuenta para acertar con tu compra, tanto del colchón como de la estructura de la cama para un adolescente. Lo más importante, a fin de cuentas, es que como padre te asegures de que la cama cumpla con las necesidades básicas de tu hijo, adecuándose a su postura y facilitando sus ciclos de descanso, y que tu hijo sea capaz de tomar decisiones sobre la decoración de su propio dormitorio, empezando por decidir cuál será su cama.
En MiCamaAbatible contamos con muchos modelos de habitaciones juveniles y camas para adolescentes que harán de su cuarto un espacio único en el que poder ser ellos mismos, no teniendo que renunciar al espacio que ocupen los muebles, por lo que optar por un mueble convertible es siempre una buena opción. Consulta nuestro catálogo, y si tienes dudas estamos a tu disposición.